Este es el artículo publicado en Libertario el 27/3/15
E
n Europa los bancos no tienen dinero, han perdido el de sus clientes, el nuestro. No es algo que tenga repercusión en los medios, no apetece difundirlo. Pero las pistas están ahí para los que no tienen el velo en la cara, para los que se han quitado el adoctrinamiento y han decidido usar el criterio propio.Es fácil verlo. En España hace tiempo que hay un límite en los pagos en efectivo, aún cuando está permitido viajar por el país con 100 000€(que no deja de ser un control al efectivo). Pero en Francia se están poniendo la pilas a un ritmo que asusta.
A partir del Septiembre del presente año, los pagos en efectivo estarán limitados a 1.000€, reduciendo en 2.000€ el anterior límite. No se perdió la oportunidad culpabilizar a los ricos, expresando que el mercado del lujo no estaba a favor de la restricción. Se esgrime la necesidad de la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico. Si el pagador es residente en el extranjero, el límite baja de 15.000€ a 10.000€. No se pueden pagar salarios en efectivo de más de 1.500€
A partir del próximo 1 de enero también se impondrán medidas para el cambio de divisa. Actualmente los franceses pueden cambiar divisas hasta 8000€ sin tener que identificarse, desde la fecha indicada el límite es de 1.000€. La transacción media es de 800€, por lo que muchas de ellas son superiores.
No se pueden entregar cantidades en efectivo para la compra de una vivienda superiores a 10.000€, ese limite permanece.
Si decides ir al banco a sacar tu dinero, un reembolso de 10.000€ o más conllevará un reporte automático a las autoridades. Si es menos, el banco decide.
Hasta ahora, se podía mandar valija o metales preciosos por correo sin restricción. A partir de ahora, en cualquier caso debe darse parte a Aduanas del movimiento, incluso si lo realiza una compañía de portes. Igualmente si realizas un envío de divisas superior a 10.000€.
También ocurre en EEUU, donde retirar 5.000$ dólares conlleva que se informe a las autoridades, y lo más probable es que no lo puedas retirar el mismo día.
Hemos visto como este tipo de regulación crece con la crisis. El chivo expiatorio es el terrorismo, los últimos años hemos vivido la época más tranquila en cuanto a terrorismo en Europa, con la desmantelación del Sinn Fein y la tregua etarra. Aún así los extranjeros tienen menos restricciones que los franceses, siendo que la supuesta amenaza viene del lado islámico.
La lucha contra el efectivo es clara. Hay que buscar razones para las limitaciones del efectivo y, además, los metales preciosos. El resultado es que todos los patrimonios personales están intervenidos sin ningún disimulo.
En un mundo fiduciario de dinero basado en deuda, la divisa que llevamos en el bolsillo no es nuestra. Alguien la tomó prestada, y pertenece al acreedor. Ese acreedor, en última instancia, es el BCE en el caso europeo. El oro es el enemigo del sistema fiduciario, no es bueno que las personas vean en el oro dinero en efectivo, que es el tratamiento legal que efectivamente tiene, por no hablar de las reservas de las naciones.
Afrontémoslo, los bancos no tienen el dinero. En un mundo en el que se permite una reserva fraccionaria del 97% y la exposición de derivados del Deutsche Bank es superior al PIB mundial, cualquier euro es fiscalizado para no perder control. Si los bancos eliminan el efectivo, los particulares jamás volveremos a tener acceso a nuestro dinero. Un dinero que no son más que números en un ordenador, sin ni siquiera soportar el coste de impresión.
La excusa de la amenaza no cuela. Criminalizar el efectivo es sembrar la semilla falsa. Será fácil saltar las restricciones y se me ocurren varias maneras. Con tener varias cuentas(recapitalizando el sector) es suficiente. Hace tiempo que los particulares se saltan muchas restricciones trabajando con dinero no fiscalizado con tremenda facilidad, como en los pagos inmobiliarios. Nadie renuncia a vender porque el gobierno no te deje cobrar. En cuanto al oro y la plata, existen muchas monedas de curso legal con un valor diez veces menor al precio del metal. Es decir: las medidas ni disuaden ni resuelven.
Creo que estamos viendo una forma moderna de la Ley de Gresham. Las manos fuertes inviertes en bienes tangibles y se deshacen de un efectivo que pierde valor a diario, por cotización y por utilidad, una vez el oro y la plata han sido alejados del imaginario popular. En una época en la que muchos depósitos a la vista empiezan a tener intereses negativos, que los particulares tengan alguna razón para mantener el dinero en el banco es difícil. No tiene sentido pagar al banquero para que custodie tu divisa si en casa no desaparece. Así que hay que eliminar la posibilidad de que la gente mantenga el dinero fuera del banco.
Si quieres mantener el efectivo en el banco, adelante. Si quieres comprar acciones o bonos o activos financieros adelante. Pero si quieres tu dinero, o si quieres ponerte corto en las divisas del mundo comprando oro vas a tener problemas. Si observas la historia, estos movimientos son los de Estados corruptos, bancos quebrados y sistemas ilíquidos. En un sistema de bancos centrales, la realidad es que aunque tengan distintos nombres todos los bancos son el mismo.
Siempre hay alternativas. Prepárate.
En un mundo fiduciario de dinero basado en deuda, la divisa que llevamos en el bolsillo no es nuestra. Alguien la tomó prestada, y pertenece al acreedor. Ese acreedor, en última instancia, es el BCE en el caso europeo. El oro es el enemigo del sistema fiduciario, no es bueno que las personas vean en el oro dinero en efectivo, que es el tratamiento legal que efectivamente tiene, por no hablar de las reservas de las naciones.
Afrontémoslo, los bancos no tienen el dinero. En un mundo en el que se permite una reserva fraccionaria del 97% y la exposición de derivados del Deutsche Bank es superior al PIB mundial, cualquier euro es fiscalizado para no perder control. Si los bancos eliminan el efectivo, los particulares jamás volveremos a tener acceso a nuestro dinero. Un dinero que no son más que números en un ordenador, sin ni siquiera soportar el coste de impresión.
La excusa de la amenaza no cuela. Criminalizar el efectivo es sembrar la semilla falsa. Será fácil saltar las restricciones y se me ocurren varias maneras. Con tener varias cuentas(recapitalizando el sector) es suficiente. Hace tiempo que los particulares se saltan muchas restricciones trabajando con dinero no fiscalizado con tremenda facilidad, como en los pagos inmobiliarios. Nadie renuncia a vender porque el gobierno no te deje cobrar. En cuanto al oro y la plata, existen muchas monedas de curso legal con un valor diez veces menor al precio del metal. Es decir: las medidas ni disuaden ni resuelven.
Creo que estamos viendo una forma moderna de la Ley de Gresham. Las manos fuertes inviertes en bienes tangibles y se deshacen de un efectivo que pierde valor a diario, por cotización y por utilidad, una vez el oro y la plata han sido alejados del imaginario popular. En una época en la que muchos depósitos a la vista empiezan a tener intereses negativos, que los particulares tengan alguna razón para mantener el dinero en el banco es difícil. No tiene sentido pagar al banquero para que custodie tu divisa si en casa no desaparece. Así que hay que eliminar la posibilidad de que la gente mantenga el dinero fuera del banco.
Si quieres mantener el efectivo en el banco, adelante. Si quieres comprar acciones o bonos o activos financieros adelante. Pero si quieres tu dinero, o si quieres ponerte corto en las divisas del mundo comprando oro vas a tener problemas. Si observas la historia, estos movimientos son los de Estados corruptos, bancos quebrados y sistemas ilíquidos. En un sistema de bancos centrales, la realidad es que aunque tengan distintos nombres todos los bancos son el mismo.
Siempre hay alternativas. Prepárate.